Me llamo David Yáñez, soy cineasta y escritor, y por encima de todo artista. Ser artista no es una profesión, tampoco un hobby, es simplemente una forma de enfrentarse a la vida. Mi vida, como todas las vidas, es un viaje. Me gusta viajar. No me importa el destino. No me siento ligado ni unido más que a los lugares que aún no conozco. Todos los paisajes que han traspasado mi retina los llevo conmigo. Todas las personas que han traspasado mi piel caminan a mi lado. Todo lo pasado, pasado está y todo lo que ha de venir, aún no ha llegado. En esta web puedes encontrar los billetes usados de esos viajes. El trabajo de un artista, bajo mi punto de vista, es eso. Los materiales de deshecho de la propia vida; del propio viaje.
Lo que hago, lo que creo y lo que siento son, en la mayoría de ocasiones, una misma cosa. Me gusta pensar que el cine que hago camina entre los géneros y narrativas ya establecidos, que está vivo, respira, come, habla y vive su propia vida y por tanto también se equivoca. En mi opinión, equivocarse es una parte importante del proceso de creación, ya que toda creación es una búsqueda y en las búsquedas, al igual que en los viajes, es siempre más importante el camino que recorres que hacia el lugar al que te diriges.
Lo que hago, lo que creo y lo que siento son, en la mayoría de ocasiones, una misma cosa. Me gusta pensar que el cine que hago camina entre los géneros y narrativas ya establecidos, que está vivo, respira, come, habla y vive su propia vida y por tanto también se equivoca. En mi opinión, equivocarse es una parte importante del proceso de creación, ya que toda creación es una búsqueda y en las búsquedas, al igual que en los viajes, es siempre más importante el camino que recorres que hacia el lugar al que te diriges.
Autoexigencia, autodestrucción y cafeína.
Este soy yo.
Bienvenidos a este website.
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