DAVID YÁÑEZ (Cáceres 1982)
Provengo de una familia humilde, por lo que no pude permitirme pagar las tasas de una escuela de cine. En su lugar compré una videocámara a plazos y me enseñé a mi mismo a hacer cine.
Hasta la fecha he comprado 5 cámaras.
Siempre estuve interesado en el arte, ya desde niño supe que sería mi profesión. A los 11 años falsifiqué la edad de mi DNI para poder entrar en una escuela de Bellas Artes. Eso creo que resume bien mi relación con el mundo del arte. Gracias a las becas del Ministerio de Educación pude ir a la Universidad. Me licencié en Bellas Artes (donde me especialicé en pintura, fotografía y audiovisuales) y más tarde en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Salamanca. La comunicación nunca me interesó demasiado, pero en la universidad prestaban el material y a mí la matrícula me salía gratis. En la universidad fue también donde empecé a escribir poesía.
Tras desencantarme de la carrera de Comunicación Audiovisual (Carrera de acabaría años después para convertirme en profesor) me mudé a Madrid, porque creía que a Madrid era donde había que ir si querías hacer cine. Allí, empecé a trabajar en televisión como montador y más tarde paseé a dirigir documentales y a adentrarme en el mundo de la publicidad. Trabajar en televisión o hacer publicidad nunca fue demasiado divertido, pero aprendí muchísimo a nivel técnico. En esa época empecé a dirigir y producir cortometrajes a nivel profesional. Unos años más tarde decidí montar mi propia productora cinematográfica, Outcast Filmmakers.
Actualmente, apartado del ruido de Madrid alterno mi trabajo cinematográfico y literario con la docencia. Allí donde me invitan (o me pagan) hablo sobre lo que esas 5 cámaras me ha enseñado.
En mis películas y libros, intento siempre hablar sobre cosas que sé de primera mano. No me gusta demasiado inventar, eso lo dejo para otros. Es muy importante para mi que lo que hago contenga verdad. La verdad es eso que hace que sientas con absoluta certeza que las emociones contenidas en esa historia se las han arrancado a alguien (muy probablemente al autor...).
Y la verdad, sólo se obtiene metiendo las manos en el barro.
Esa es la razón por la que siempre estoy empuñando una cámara y envuelto en problemas... Bueno, eso y mi debilidad por las chicas equivocadas.
Provengo de una familia humilde, por lo que no pude permitirme pagar las tasas de una escuela de cine. En su lugar compré una videocámara a plazos y me enseñé a mi mismo a hacer cine.
Hasta la fecha he comprado 5 cámaras.
Siempre estuve interesado en el arte, ya desde niño supe que sería mi profesión. A los 11 años falsifiqué la edad de mi DNI para poder entrar en una escuela de Bellas Artes. Eso creo que resume bien mi relación con el mundo del arte. Gracias a las becas del Ministerio de Educación pude ir a la Universidad. Me licencié en Bellas Artes (donde me especialicé en pintura, fotografía y audiovisuales) y más tarde en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Salamanca. La comunicación nunca me interesó demasiado, pero en la universidad prestaban el material y a mí la matrícula me salía gratis. En la universidad fue también donde empecé a escribir poesía.
Tras desencantarme de la carrera de Comunicación Audiovisual (Carrera de acabaría años después para convertirme en profesor) me mudé a Madrid, porque creía que a Madrid era donde había que ir si querías hacer cine. Allí, empecé a trabajar en televisión como montador y más tarde paseé a dirigir documentales y a adentrarme en el mundo de la publicidad. Trabajar en televisión o hacer publicidad nunca fue demasiado divertido, pero aprendí muchísimo a nivel técnico. En esa época empecé a dirigir y producir cortometrajes a nivel profesional. Unos años más tarde decidí montar mi propia productora cinematográfica, Outcast Filmmakers.
Actualmente, apartado del ruido de Madrid alterno mi trabajo cinematográfico y literario con la docencia. Allí donde me invitan (o me pagan) hablo sobre lo que esas 5 cámaras me ha enseñado.
En mis películas y libros, intento siempre hablar sobre cosas que sé de primera mano. No me gusta demasiado inventar, eso lo dejo para otros. Es muy importante para mi que lo que hago contenga verdad. La verdad es eso que hace que sientas con absoluta certeza que las emociones contenidas en esa historia se las han arrancado a alguien (muy probablemente al autor...).
Y la verdad, sólo se obtiene metiendo las manos en el barro.
Esa es la razón por la que siempre estoy empuñando una cámara y envuelto en problemas... Bueno, eso y mi debilidad por las chicas equivocadas.
- 2016 Berlinale Talents - Festival de Berlín (Alemania)
- 2016 Sabah Film Academy (tutor) - KKIFF (Malasia)
- 2016 Residencia de escritura - Fest. de Málaga / Fest. Cinehorizontes (Francia)
- 2015 Summer School - Festival de Locarno (Suiza)
- 2014 Grundtvig Workshop - Festival de cortometrajes de Niza (Francia)
- 2012 Grundtvig workshop - Festifaï (Francia)